Este artículo o ppt se basa en las investigaciones de varias personas, como por ejemplo María Jesus Paredes Duarte y Antonio Benítez Burraco. Estas dos personas se especializan en el lenguaje y el habla. Las autoras del artículo buscan representar o explicar de la mejor manera posible el lenguaje y el habla, y el cómo este se relaciona con el sistema nervioso y la filosofía al mismo tiempo (neurofisiología). Para esto, se basa en estudios reales y en personas que tienen un mayor conocimiento del tema (como ya fue mencionado anteriormente).
Este artículo está estructuralmente construido por una introducción y desarrollo en donde las autoras nos intentan explicar de manera detallada y precisa la creación o formación del habla.
La formación del habla empieza al instante en que un humano nace o incluso dentro del útero de la madre. Cuando el embrión tiene los oídos completamente desarrollados es capaz de distinguir sonidos, principalmente vocales como la "a" y la "e". Esto ocurre porque si bien el lenguaje no se puede aprender de manera innata, la capacidad de aprenderlo, si se puede.
El cerebro está preparado para aprender y entender el lenguaje desde temprana edad, lo cual fue comprobado por estudios en donde se demostraba que la actividad cerebral de un niño y un adulto mientras dormían era la misma, o más específicamente, que las regiones del cerebro que estaban activas, eran las mismas.
La formación del habla empieza al instante en que un humano nace o incluso dentro del útero de la madre. Cuando el embrión tiene los oídos completamente desarrollados es capaz de distinguir sonidos, principalmente vocales como la "a" y la "e". Esto ocurre porque si bien el lenguaje no se puede aprender de manera innata, la capacidad de aprenderlo, si se puede.
El cerebro está preparado para aprender y entender el lenguaje desde temprana edad, lo cual fue comprobado por estudios en donde se demostraba que la actividad cerebral de un niño y un adulto mientras dormían era la misma, o más específicamente, que las regiones del cerebro que estaban activas, eran las mismas.
Antonio Benítez Burraco realiza una investigación de la caracterización neuroanatómica y neurofisiológica del lenguaje, donde se obtiene como principal resultado la división del cerebro en tres partes; una anterior (se localiza la representación motora de las palabras); una posterior (se localiza la representación auditiva de las palabras) y una tercera (encargada del procesamiento fonológico y de la decodificación durante el proceso de la lectura). A partir de estos resultado se concluyó que el lenguaje no se concentra en un solo sector del cerebro y por tanto alguno de los déficit del lenguaje tienen que ver con la falla de alguno de estos tres sistemas.
Para concluir, podemos decir que el desarrollo del lenguaje empieza desde muy pequeños y que con "desarrollo" no nos referimos a simplemente, escuchar y repetir, sino que a todo el proceso que se encuentra detrás (la asociación de la palabras, el diferenciar los significados, etc). Además podemos destacar que, como toda estructura del cerebro, si una parte falla, en consecuencia las otras no funcionarán correctamente y esto se puede asociar a un trastorno del lenguaje.
-Luci
-Luci